lunes, 7 de mayo de 2007

La Predestinación.

Por: R.C. Sproul.

Proverbios 16:4

Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, Y aun al impío para el día malo.

Juan 13:18

No hablo de todos vosotros; yo sé a quienes he elegido; mas para que se cumpla la Escritura: El que come pan conmigo, levantó contra mí su calcañar.

Romanos 8:30

Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.

Efesios 1:4-5

Según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad,

2 Tesalonicenses 2:13-14

Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad, 14 a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo.


Pocas doctrinas suscitan tanta polémica o provocan tanta consternación como la doctrina de la predestinación. Se trata de una doctrina difícil, que necesita ser discutida con gran cuidado y precaución. A pesar de eso, se trata de una doctrina bíblica, con la cual tenemos que lidiar. No debemos osar ignorarla.

Prácticamente, todas las iglesias cristianas tienen algún tipo de doctrina sobre la predestinación. Eso es inevitable visto que el concepto claramente se encuentra en las Escrituras. Muchas iglesias, entretanto, discuten – muchas veces vehementemente – en cuanto a su significado. El punto de vista metodista es diferente del punto de vista luterano, el cual está en desacuerdo con el punto de vista presbiteriano. Aún cuando sus puntos de vista difieran, cada uno de ellos está intentando a una sólida comprensión de esta difícil cuestión de manera apropiada.

En su forma más elemental, la predestinación significa que nuestro destino final, sea el cielo o el infierno, es decidido por Dios no solamente antes de irnos para allá, sino que antes de haber nacido. La predestinación enseña que nuestro destino final está en las manos de Dios. Otra manera de expresar esto es: desde toda la eternidad, incluso antes de que existiéramos, Dios decidió salvar algunos miembros de la raza humana y permitir que el resto de la raza humana pereciera. Dios escogió – escogió algunos individuos para ser salvos en la eterna bendición del cielo y escogió pasar por sobre otros, permitiendo que sufriesen las consecuencias de sus pecados en el tormento eterno del infierno.

La aceptación de esta definición es común a muchas iglesias. Para llegar a una pregunta así, alguien debe preguntar: ¿Cómo Dios hizo tal elección? El punto de vista no reformado, defendido por la gran mayoría de los cristianos, es que Dios hizo esa elección basándose en su presciencia. Dios escoge para vida eterna a aquellos que sabe que le escogerán. Ese concepto es llamado la visión presciente de la predestinación, porque se basa en la presciencia de Dios en cuanto a las desiciones o acciones humanas.

La visión reformada difiere en el hecho de que ella ve la decisión final para la salvación en las manos de Dios, no en las manos del hombre. Según este punto de vista, la elección de Dios es soberana. No se basa en decisiones o respuestas previstas por parte de los seres humanos. Sin embargo, ve estas decisiones fluyendo desde la gracia soberana de Dios.

El punto de vista de la Reforma afirma que ninguna persona caída jamás escogería a Dios por iniciativa propia. Las personas caídas aún que tengan libre agencia y pueden escoger lo que desean. El problema es que no tienen ningún deseo por Dios y no escogerán a Cristo a menos que antes sean regeneradas. La Fe es un don que proviene del nuevo nacimiento. Solamente aquellos que fueron elegidos pueden responder con Fe al Evangelio.

Los elegidos escogen a Cristo solamente porque antes fueron escogidos por Dios. Como en el caso de Esaú y Jacob, el elegido fue escogido exclusivamente en base al beneplácito soberano de Dios y no con base en algo que hubiese hecho o dejado de hacer. Pablo declara:

" 10 Y no sólo esto, sino también cuando Rebeca concibió de uno, de Isaac nuestro padre 11 (pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que llama), 12 se le dijo: El mayor servirá al menor… 16 Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia." Romanos 9.10-12, 16

El problema mas incomodo que envuelve la predestinación es que Dios no escoge o elige salvar a todas las personas. El reserva para si el derecho de tener misericordia de quien quiera tener misericordia. Algunos miembros de la humanidad caída reciben la gracia y la misericordia de la elección. Dios ignora a los restantes, dejándolos en sus pecados. Los no elegidos reciben justicia. Los elegidos reciben misericordia.

Nadie es tratado con injusticia. Dios no es obligado a ser igualmente misericordioso con todo. Es decisión de Él en cuanto a ser misericordioso. Incluso así nunca puede ser acosado de ser injusto con cualquier persona (ver romanos 9: 14, 15)

Resumen:

1. La predestinación es una doctrina difícil y debe ser tratada con cuidado.

2. La Biblia enseña la doctrina de la predestinación.

3. Muchos cristianos definen la predestinación en términos de presciencia de Dios.

4. La visión de la Reforma no considera la predestinación como una explicación para la predestinación bíblica.

5. La predestinación se basa en la elección de Dios y no en la elección de los seres humanos.

6. Las personas nos regeneradas no tienen ningún deseo de escoger a Cristo.

7. Dios no elige a todas las personas. Se reserva el derecho de tener misericordia de quien quiera

8. Dios no trata a nadie injustamente.



Traducido por Ñañi y Marcelo...